La uña encarnada, también conocida como onicocriptosis, es una afección común que se produce cuando el borde o lateral de la uña penetra la piel, produciendo diversas molestias como: hinchazón, inflamación y dolor.
En la mayoría de los casos provoca dolor agudo en la zona y puede llegar a infectarse, produciendo secreción de pus y más inflamación. Normalmente este padecimiento suele suceder en el primer ortejo (El dedo gordo del pie) sin embargo puede desarrollar en cualquier dedo por diferentes causas. Principales causas de una uña encarnada
Corte inadecuado de las uñas: Una de las causas más comunes y razón de consulta a un podólogo es el mal corte de uñas, al cortar en exceso los laterales de la uña. Cuando no se realiza con la técnica o equipos adecuados, suelen dejarse pequeñas astillas o deformidades en la uña, que al crecer terminarán por clavarse en el tejido blando del dedo, ocasionando así dolor.
Uso de calzado inadecuado: Utilizar calzado pequeño o de punta estrecha puede hacer que la uña se vea afectada al estar sometida a cierta presión de forma continua.
Traumatismos: Ya sean pequeños golpes repetitivos o un accidente. Esta clase de microtraumatismos pueden terminar generando una uña encarnada, debido a la presión contra los dedos de los pies.
Malformaciones en las uñas: En algunas ocasiones este problema tiene un componente genético y ya sea por la forma de los dedos o del pie, se podría tener más predisposición a padecer este tipo de patologías.
Tipos de Onicocriptosis
Existen 3 tres grados diferentes o estadíos de uña encarnada, y dependiendo de este se podrá recurrir a un tratamiento en específico.
Grado 1: La uña presiona excesivamente sobre la piel del dedo, provocando enrojecimiento, dolor e inflamación.
Grado 2: Se produce una infección en la zona, formando un absceso.
Grado 3: El tejido del dedo forma un granuloma, el cual es una tumoración de células benignas.
Tratamiento
El primer paso para tratar una uña encarnada es acudir al podólogo más cercano. Existen diferentes tratamientos que van de más conservadores a más agresivos dependiendo del grado en el que se encuentre.
Tratamientos conservadores:
En aquellas onicocriptosis de grado 1 o grado 2 que no presenten infección, el podólogo realizará la extracción de la espícula (trozo de uña clavada) mediante instrumental estéril.
Tratamiento quirúrgico:
En aquellas onicocriptosis de grado 2 y 3, que presentan infección y granuloma, así como en aquellos uñeros que recidivan, deberá optarse por la opción quirúrgica.
Este tipo de tratamiento consiste en la extracción de la porción de uña que se encarna en la piel llegando hasta la matriz (donde se genera la lámina ungueal). De esta manera, se realiza una quemadura química con ácido fenólico en la porción de matriz afectada. Como resultado, únicamente la porción conflictiva de la uña no volverá a crecer, quedando una uña estéticamente normal
¿Cómo prevenir esta patología?
La mejor manera de prevenir es manteniendo un corte correcto de uñas, el cual debe ser de forma recta. Es recomendable acudir a visitas periódicas con el podólogo, al menos una vez al mes para un corte de uñas y una revisión general de los pies.
Otra forma de evitar este problema, es usar calzado adecuado, haciendo esto no sólo se evitan las malformaciones en las uñas, si no también un gran número de patologías diferentes en los pies, rodillas, cadera, espalda, etc.
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